jueves, 30 de junio de 2011

~ Capítulo 28;

POV CARLA
Inés: Y a-ahora, ¿a qué e-esperas? – me preguntó riendo.
Carla: ¿ Qué espero de qué?
Inés: Hoy e-estás tonta, ¿eh? –me pegó una colleja.
Carla: ¡Au! – me quejé, aunque no me había dolido, pasándome la mano por la cabeza.
Inés: ¿Qué a qué e-esperas para lla-mar a Doug? –soltó una carcajada.
Carla: Pues chica, habla claro, que no me entero. –reímos. –No sé. Está en su casa, hablando con Dan.
Inés: Son t-tíos. –comentó. –No pueden e-estar más de 10 m-minutos hablan-do seriamente. –Me encogí de hombros riendo. – An-da, ve.
Carla: Pero… -dije no muy convencida.- No quiero dejarte sola.
Inés: -arqueó una ceja.- Oh sí, es v-verdad, como t-tengo 3 años… -contestó en tono irónico.
     Fui a reprocharle porque la idea de dejarla e irme no me gustaba, no porque le fuese a pasar algo, sino porque a nadie le gusta estar solo, y ahora que lo habíamos arreglado, quería lo mejor para ella, pero la puerta de la habitación se abrió y apareció por ella el rostro de Noe.
Noelia: ¿Chicas? –Nos sonrío.- Estamos abajo, ¿vale?
Carla: ¿Quién, tú y Jack? –reímos.
Noelia: Sí, Jack y yo, y Alice y Harry. –Contestó burlona.- Hemos ido a dar una vuelta por ahí los cuatro y ya hemos llegado.
Inés: Uuuh… En plan p-parejitas… -Soltamos una carcajada.
Noelia: ¿Bajáis o qué? –nos volvió a preguntar riendo e ignorando nuestros comentarios idiotas.
     Inés y yo nos levantamos y bajamos con Noelia al salón. Como ya nos había dicho allí estaban los tres. Nos saludamos todos y nos sentamos como pudimos todos en los sofás. Por suerte nadie tuvo que sentarse en el suelo.
Inés: Carla, -me volvió a llamar. –Ya no e-estoy sola. –me dijo sonriente.
Carla: ¿Me quieres decir que interés tienes tú en que me vaya con Dougie? –se encogió de hombros.- Vale… Está bien. –me levanté del sofá. –Esto… chicos… -dije llamando la atención de todos.- Me voy a dar una vuelta.
Jack: ¿Sola?- Preguntó extrañado.- Podemos ir todos.
Carla: Bueno… En realidad había pensado…
Alice: ¿Has quedado con un chico?
Noelia: ¿Sí? ¿Quién es, en?
Harry: Cuéntanoslo to-do. –Dijo con voz de chica. Todos reímos.
Carla: Bueno, ya nos veremos. –dije mientras iba hacia la puerta.
Jack: Sí, sí, pero no has respondido ninguna pregunta… -Comentó en tono misterioso.
     Le saqué la lengua y cogí mis cosas antes de salir por la puerta. Fui directa a la casa de al lado, la de los chicos, y toqué al timbre. Esperé varios segundos, y al fin abrieron la puerta. Un adorable rubio apareció tras ella.
Tom: Carla, ¿qué tal?
Carla: Hola Tom. –dije contenta. Seguidamente salté a darle un beso en la mejilla. -¿Está Doug?
Gio: Se fue con Danny hace rato ya. –había aparecido por las espaldas de Tom. Me dio un beso en la mejilla alegre y se enroscó en la cintura del rubio.
Carla: ¿Con Danny? –pregunté curiosa. –Qué raro, ¿no?
Gio: Para raros ellos. No sé, estaban extraños. –Comentó.
Carla: Y… ¿No sabéis a donde fueron? –Se encogieron de hombros a la vez que negaban con la cabeza.- Bueno, veré lo que hago. -les sonreí en forma de agradecimiento. – Por cierto, todos están en casa, podéis ir con ellos si queréis.
Tom: No sé, estamos bien aquí. –dijo mirando a Gi que le sonrió cómplice.
Carla: Vale… Ya lo pillo. –reí. -¡Adiós! –me despedí moviendo mi mano mientras me iba por la calle.
     Que Danny y Doug hubiesen salido a la calle no me daba buena sensación. Aunque no tenía por qué ser lo peor. Quizás se habían arreglado y habían ido a tomar algo… ¿A quién quería engañar? Cogí el móvil y llamé a Dougie, que después de varios pitidos, lo cogió.
Carla: ¿Doug? ¿Dónde estás?
Dougie: En el parque de siempre. ¿Por?
Carla: Por nada. Voy para allá, ¿vale?
Dougie: Genial. –sonreí ante aquella respuesta.
Carla: Estoy ahí en nada.
     Colgué y fui directa hacia el ya bautizado el parque de siempre.
     Allí estaba, sentado en un banco mirando a la gente de alrededor. Cuando me vio se levantó y esperó a que llegase a su lado.
Dougie: Hola. –me saludó con las manos en los bolsillos.
Carla: Hola. –le dije a la vez que arqueé mis cejas. -¿No piensas besarme? –le pregunté sonriente.
Dougie: ¿Lo piensas tú?
Carla: Puede…
     Se encogió de hombros y rodé los ojos. Fui yo la que finalmente tuve que colgarme de su cuello a besarle. Riendo sacó sus manos de los bolsillos y me abrazó al mismo tiempo. Al separarnos seguí  de puntillas para estar a la misma altura que él, seguí con jugando con mis manos y su suave y rubio pelo, y él siguió son sus brazos enroscados en mi cintura.
Dougie: ¿Qué tal?
Carla: Bastante bien, la verdad. –confesé. Junté nuestras narices, risueña. –Lo de Inés está solucionado.
Dougie: -Sonrió de lado. –Me alegro mucho.
Carla: ¿Y tú con Danny? He estado en tu casa y Gi me ha dicho que os fuisteis y que estabais raros.
     Movió sus hombros y se separó de mí. Dejándome a mí de pie, se sentó en el banco. Agobiado se pasó varias veces las manos por su cara y su pelo.
Carla: Doug, -me senté a su lado y le cogí sus manos para quitárselas de la cara y que me mirase. -¿Qué ha pasado?
Dougie: Resumiendo… No se ha arreglado. Es más, te diría que está peor que antes. Pero le he dejado bien claro que hable contigo y te pida perdón.
Carla: Gracias, Dougie. –le abracé muy fuerte. Realmente era muy importante que hubiera hecho eso. Que se enfadase con su mejor amigo para que me pidiese perdón era muy grande.
Dougie: Sólo quería ayudarte.
Carla: Lo has hecho, Dougie. Aunque no me pida perdón nunca, tú me has ayudado. Y mucho.
     Como respuesta me acomodó cerca de él, con su brazo derecho por mis hombros y su mano izquierda enlazada a la mía.
Carla: ¿Crees que se le pasará? -le pregunté. No se me iba de la cabeza.- A Danny, digo.-aclaré.
Dougie: No sé. A veces puede llegar a ser todo un crío. Espero que por lo menos lo que le he dado sirva para algo.
Carla: ¿El qué? –le pregunté esta vez girando la cabeza para mirarle.
Dougie: Pues… -rió recordando.- Es gracioso. Verás, resulta que… Bueno, me estaba vacilando demasiado y no tuve otra opción que darle un buen puñetazo.
Carla: ¿Qué hiciste qué? –pregunté alarmada. Me miró poniendo ojitos. – ¡Dougie! ¡Has pegado a Danny! –le dije en tono regañina.
Dougie: Me estaba tocando demasiado los cojones. –se excusó. Negué con la cabeza mientras le sostenía la mirada. –Soy un niño muy malote.- Típico comentario Poynter en el momento más oportuno. -¿Y mi castigo? –me miró con una sonrisa pícara.
Carla: Tú lo que eres es un idiota. –reí. – Y los idiotas no tienen remedio, así que no hay castigo que valga. –seguidamente le di un manotazo en frente y me levanté ignorando sus quejas.
Dougie: ¿Me pegas y te vas de rositas? –dijo mientras se levantaba y se ponía a mi lado.
Carla: Es tarde.
Dougie: ¿Y? –Me encogí de hombros.- Prefieres irte a casa antes que quedarte conmigo aquí. Es eso, ¿verdad?
Carla: -abrí mucho los ojos en forma de asombro.- Oh sí, es eso totalmente. –Puse mis brazos sobre sus hombros y acerqué mi cara a la suya hasta darle un nuevo beso.- Como no me gusta nada estar contigo, me quiero ir a casa. –contesté de nuevo en tono irónico.
Dougie: -soltó su dulce risa.- Entonces no lo entiendo.  Quedemos aquí, veamos a la gente feliz, miremos las estrellas, hagamos el amor en el césped, durmamos abrazados bajo la luz de la luna…
Carla: Eh, eh, eh, Poynter, echa el freno. –Corté su relato demasiado poético.- ¿Hacer el amor en el césped? –Pregunté riendo. Él se encogió de hombros.- Hmmm… ¿Y qué te parece un pequeño paseo a la vera del río y después volver a casa?
Dougie: Mucho mejor. –Contestó encima de mis labios, para luego dar otro beso.

lunes, 27 de junio de 2011

~ Capítulo 27;

Bueno pequeños duendecillos del bosque, here me encontráis again. :3
Capítulo 27 muy, muy largo. Por lo menos para lo que os tengo acostumbradas.
Deciros que últimamente y en lo que resta de verano tendré algo de tiempo libre,
y escritos ya tengo hasta el 32 incluído, además con la mirada a buscar un final chachi.
Pero que aún queda, eh. xD
Os dejo ya. Quiero comentarios y tal. :3
Love you all. <3
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     Llegamos a casa. No habíamos hablado nada durante el trayecto y no me gustaba nada esa situación. Nos paramos en la puerta y me giré para estar de cara a él.
Dougie: Bueno... Ve tú a hablar con Inés y yo a mi casa a hablar con Danny... -dijo casi sin mirarme.
Carla: Dougie... ¿Qué pasa? -como contestación decidió mirar el suelo.- Doug... -insistí.- Dougie, mírame.- al fin lo hizo.- Tú también no, por favor... -le pedí.
     Sí Dougie también me daba de lado en un momento como ese me terminaría por deprimirme del todo.
Dougie: Carla, no te estoy haciendo nada. Es más, si estoy aquí es para ayudarte. -sonaba seco, mucho.
Carla: Sabes que tengo razón...
Dougie: ¿Y qué quieres que te diga? ¿Qué me jodió que te acostases con Jones? -preguntó elevando la voz.- Pues sí, me jodió. Y mucho. –se giró dándome la espalda y respirando hondo, bajando esos humos que le habían dado.
Carla: Dougie… -le volví a llamar casi en un susurro. Alargué mis brazos y le rodee con ellos por la espalda. – Por favor… Sabes que no hubiera pasado si un hubiésemos bebido. –se giró y me miró. Seguidamente apoyé mi frente en la suya.- No hubiera ocurrido, ¿me oyes?
    No me contestó, solo se limitó a sostenerme la mirada. No lo pensé más y más como un movimiento intuitivo junté nuestros labios. Nada, solo ese simple roce me puso los pelos de punta. Sé que no era la primera vez, pero sí quizás la primera que lo sentía en serio. Pocos segundo duró, pero los suficientes para que se me dibujase una estúpida sonrisa en la cara. Dougie me volvía a mirar, ahora más satisfecho, incluso se relamía los labios.
Carla: ¿Qué? –pregunté riendo.
Dougie: Nada, nada. –Se excusó.- ¿Y si…?
     Sin terminar la pregunta hizo un gesto que me señalaba a mí y a él repetidas veces. Reí de nuevo sin entender.
Dougie: Ya sabes… -abría mucho los ojos y sonreía.
Carla: -entrecerré los ojos.- Errm… Sí… Claro… -dije fingiendo que lo entendía.
Dougie: Eres un poco tonta, ¿no? –soltó una carcajada.
    Fui a contestar, pero me volvió a besar. Más intensamente. Esta vez fue más profundo que un simple roce. Al separarse arqueó las cejas.
Carla: Aaah… Era eso… -dije entendiendo. Me volví a ganar una carcajada por su parte.- Será mejor que me vaya ya. Tenemos cosas que hacer, ¿recuerdas?
    Se le borró la sonrisa de la cara y fue como un ‘Sí, lo recuerdo.’ Miré hacia la parte de arriba de la casa. Desde ahí se veía la ventana del cuarto de Inés. Imaginé que estaría escuchando música o con la guitarra. Volví la cara a Dougie.
Dougie: Si necesitas algo… Estoy ahí, ¿vale? –dijo moviendo ligeramente su cabeza a su casa.
    De nuevo acerqué mis manos a su suave pelo y lo atraje a mí. Un último beso antes de que cada uno se fuera a su respectiva casa.
     Entré en casa, ya no sé si pensando en Dougie o en lo que iba a decirle a Inés. La casa estaba demasiado silenciosa para lo que era normalmente. Me había imaginado a Noelia jugando a la consola, pero el salón estaba totalmente solitario. Subí arriba y el silencio seguía reinando. Noe no debía de estar en casa, porque si no eso no era normal. Fui directamente al cuarto de Inés. Toqué a la puerta varias veces y abrí sin ni siquiera esperar respuesta. Sin saber muy porqué, me había puesto algo nerviosa de repente. Era Inés y no era la primera vez que habíamos tenido nuestras pequeñas guerras. Me la encontré sentada en la cama. Jugaba con una de sus pulseras.
Carla: Inés, ¿puedo…?
    Me sonrió tímidamente y fue algo que no me esperaba para nada. Aun así, esa sonrisa tan preciosa que ella tenía me calmó por completo, como por arte de magia. Pasé más tranquila y me senté con ella en la cama.
Inés: Hacéis b-buena pareja. –empezó ella hablando.
Carla: ¿Cómo? –pregunté sin entender. Desde luego, ese no era mí día de pillar las cosas a la primera.
Inés: Doug y tú.
Carla: Pero… ¿tú cómo…? –Me señaló la ventana.- Aaah. –nos había estado viendo desde su ventana. – Bueno, yo venía porque…
Inés: Se a lo q-que venías. –Manía de no dejarme terminar de hablar.- Y no t-te preocupes. –me volvió a sonreír.
     Esto había sido demasiado fácil. Tenía que haber trampa por algún lado.
Inés: Carla. –Me llamó sacándome de mis pensamientos.- Va e-en serio. Tú nunca b-bebes y al hac-cerlo es normal que… bueno, hicieras c-cosas sin ser m-muy consciente.
Carla: -reí levemente.- Gracias a Dios, pensé que no me ibas a perdonar, y… Dios, no sé… -nos sonreímos y ella se acercó a mí a abrazarme. –Lo siento de todas formas.
     Al separarnos vi que se había emocionado.
Carla: Cariño.... –le dije secando sus lágrimas.
Inés: No p-pasa nada. –dijo mientras sonreía y negaba con la cabeza.- Es que… -se encogió de hombros.- Te q-quiero mucho, Carla.
Carla: Tonta, no llores por eso. – le volví a abrazar. –Yo también te quiero, pequeñaja.
     Cuando se separó, de nuevo nos miramos. No dijimos nada y sonreímos. Y esas eran las situaciones que más me gustaban, las que no hacen falta hablar porque se dice todo con la mirada.
Carla: Por cierto ¿sabes dónde está Noe? –se encogió de hombros. Nos quedamos pensando unos segundos.- Jack. –dijimos a la vez.  Soltamos una carcajada juntas.
POV DOUGIE
     Había besado a Carla, y había sido genial. Me empezada a preocupar lo que sentía verdaderamente por ella. Todas las mariconadas que pasaban por mi cabeza se esfumaron nada más entrar en casa. Mi visión era Danny tumbado en el salón haciendo… nada, y Tom y Gio en la cocina. Ignoré a los tortolitos y fui directo a Jones.
Dougie: ¿Qué, te lo pasaste bien anoche, eh cabrón?
     Me miró, de arriba abajo, no me dijo nada, y volvió su vista al infinito.
Dougie: ¿Hola? Te estoy hablando a ti, idiota.
Danny: Déjame en paz, ¿quieres?
Dougie: Tío, ¿de qué vas?
Danny: Olvídame, en serio. No estoy para tonterías.
Dougie: ¿¡Hacer a Carla que beba y follártela es una tontería!? –grité lleno de furia.
     Danny se levantó ante tal grito y se pudo cara a cara conmigo, incluso nuestras frentes llegaban a tocarse.
Danny: Que me dejes en paz. Que estoy hasta los cojones de que me digas que está bien o que está mal. Que no eres mi puto padre. Que hago lo que me sale de ahí y que si me equivoco, no te preocupes que toda la mierda ya me la comeré yo, como lo hice anoche.
     Habló demasiado tranquilo para el mensaje que me estaba transmitiendo. No elevó la voz ni nada, pero esas palabras me jodieron. En ese momento Gio entró en el salón. Ni nos dimos cuenta hasta que habló.
Gio: Chicos, ¿qué hacéis? –preguntó extrañada.
Danny: Nada. –contestó rápidamente a la vez que me dio un ligero empujón, que apenas se percibió y que me alejó de él.
Gio: Hmmm… Bueno, ¿queréis merendar? La tarta tiene muy buena pinta. –dijo feliz. Eso era algo que siempre me había gustado de ella. Siempre despedía felicidad por donde quiera que fuese. Era muy reconfortante.
Danny: Yo no. Me voy a dar una vuelta. Que os aproveche.
     Sin esperar respuesta salió del salón y fue hacia la puerta, cogió su chaqueta y se fue.
Gio: ¿Estáis bien?
     Ni siquiera escuché a Gio. Esa reacción me había dado demasiado coraje. Típica de Danny. Que hay problemas, Danny se pira. Odiaba que siempre se saliese con la suya. Molesto cogí su camino y también fui hacia la calle.
Gio: ¡Doug!
Dougie: ¿Qué? –pregunté sin saber. Luego miré a Gio, que no entendía nada. –Ah sí. Perdona. – Fui de nuevo hacia donde ella estaba y le besé en la mejilla. Como una flecha fui de nuevo a la calle.
Gio: ¿Pero a éstos que les pasa?
Tom: ¿Gi? –dijo al entrar en el salón. Llevaba la tarta que habían hecho en las manos.- ¿Y Danny?
Gio: Pues… -se quedó pensativa en todo lo que había ocurrido.- Resulta que también estaba Doug aquí, pero no sé por qué se han ido ya los dos sin decir nada.
Tom. Bah, no te preocupes. Ya sabes como son. –Se puso a su lado.- Mira el lado bueno.- Tom siempre mirando el lado bueno.- Ahora estamos solos.
     Le sonrió y le dio un pequeño beso antes de llevar la tarta a la mesa.
     Fuera seguí a Danny. Cuando salí de casa le pillé antes de que se marchase y le perdiese de vista.
Dougie: Jones, espera. –le grité.
Danny: Poynter, eres un puto pesado. –dijo volviéndose.
Dougie: ¿Qué esperabas, que te dejase ir sin dar ni una jodida explicación?
Danny: -rió irónico.- ¿Explicaciones, a ti? –recalcó.
Dougie: Carla está muy mal.
Danny: Pues le daré explicaciones a ella, no a ti. –contestó rápido.
Dougie: No sé qué coño he hecho para que te portes así conmigo, de verdad.
Danny: ¿Te vas a poner a llorar? –preguntó en tono burlón.
Dougie: Vete a la puta mierda. Estoy a hasta las narices de ti y tu mierda de chulería.
Danny: ¿Y…?
Dougie: -me tuve que contener lo más grande para no soltarle una buena hostia ahí mismo.- Paso de hablar contigo. Lo único que te digo es que hables con Carla, porque ella no tiene culpa de que seas tan sumamente gilipollas. Y atrévete a tocarla otra vez, ¿estamos? 
Danny: Y el premio al superhéroe del año para... ‘UltraPoynter’.  Enhorabuena, chico. –dijo dándome unas cuantas palmaditas en la espalda.
     Y ahí sí que ya no pude más. Cogí mi puño lleno de furia y lo estampé en la mejilla de Danny. Perdió el equilibrio y casi cae al suelo, aunque al final no.
Danny: Estás loco.- dijo posando la yemas de sus dedos sobre su mejilla.
Dougie: Las mejores personas lo están.
Danny: Paso de seguir esta estúpida conversación, si es que se puede llamar así.
     Dio media vuelta y se largó. Esta vez no hice nada para impedírselo. Había pegado a Danny. Había pegado al que era mi mejor amigo, a mi hermano. Pero por otra parte, la rabia de como se había comportado seguía ahí y me daban ganas de ir tras él y darle una buena paliza. Seguía muy nervioso y no sabía qué hacer, ni dónde ir. En casa estaban Tom y Gi y no quería molestarles. Lo segundo que se me pasó por la cabeza fue Carla. Quería verla y estar con ella, pero en su casa estaba hablando con Inés y tampoco quería interrumpir. Pensé que dar un paseo y despejar mi mente sería lo mejor.

martes, 21 de junio de 2011

~ Capítulo 26;

Dougie: ¿Quieres un helado? -me preguntó.
Carla: Hmmm..-vacilé unos segundos.- Pues.. Mira, sí. De mora. Me encanta el helado de mora.
Dougie: Puuag.. Mora.. -dijo poniendo cara rara.
Carla: Idiota. -reí y le dí un leve golpe en el brazo. -A ver, ¿cuál le gusta al señorito?
Dougie: Cho-co-la-te. -contestó divertido.
Carla: Lo capto. No tienes por que hablarme como si fuera tonta. -dije sonando seca. Al ver la cara que se le quedó a Doug, solté una carcajada.
Dougie: Te ríes de mí.
Carla: ¿Yo? Qué va, qué va.. Anda, mira, una heladería. -exclamé señalando a la acera de enfrente.
     Cruzamos y pedimos los helados. Fuimos dando un paseo. La gente se volvía a mirarnos. Más bien las chicas. Algunas, llenas de rabia, se acercaban y hablan con Dougie, se tiraban fotos y literalmente se tiraban encima de él. Al principio era divertido. Luego me empezó a molestar. No el hecho de que se acercaran a Dougie, eso era normal. Cualquier fan lo haría. Pero la forma de indiferencia con la que se dirigían a mí, pues me jodía. Mi cara no debía ser de muchos amigos, porque hasta él se percató y nos escaqueamos como pudimos entre las callejuelas.
Dougie: ¿Y esa cara?
Carla: No sé, las niñas esas no me cayeron bien, simplemente. -comenté con algo de desprecio.
     Dougie sonrió de lado.
Dougie: Cambiemos de tema, por favor. -rió.
Carla: Eh, eh, eh. -le paré. - ¿Se puede saber de qué te ríes?
Dougie: ¿Qué? ¿Yo? Nada..
     Bufé girando la cara y cogiendo un paso más rápido, adelantándome a él.
Dougie: Pero tonta, no te enfades. Que no es nada. -dijo al estar detrás mía. Me paré y me dí la vuelta quedando delante de su cara.
Carla: No me he enfadado.. -sonrió negándo con la cabeza.
Dougie: ¿Entonces..?
Carla: Entonces.. ¿qué?
Dougie: Joder, vaya humos que tienes hoy. No se puede hacer una broma. ¿Es que no has dormido bien?
     Me quedé pensando durante unos segundos. Todo lo ocurrido la noche anterior pasó por mi cabeza en un recuerdo rápido.
Dougie: ¿Hola? -dijo pasando su mano por delante su mis ojos.
     Salí de mis pensamientos y le miré.
Carla: No.. No he dormido bien. -suspiré.- Y por mi culpa otras personas tampoco lo habrán hecho. -aparté la vista al suelo. Culpable era como me sentía ahora.
Dougie: ¡Hey! -posó las manos en mis hombros y movío su cara hasta ponera delante de la mía. - ¿Qué pasa?
Carla: Joder, Dougie, soy una imbécil. -me solté de él y andé hacia un banco, donde me senté.
Dougie: Ya. -rió. Se sento a mí lado.- ¿Pero por qué?
     Dudé unos segundos mientras le miraba.
Carla: Bueno.. Yo.. -suspiré.- Anoche.. Danny estuvo en casa, y bueno.. Ya sabes.. Y.. -un nudo se forma en mi garganta y me impidió seguir hablando.
Dougie: ¿Qué coño te ha hecho Danny? -gritó alterado a la vez que se levantaba del banco.
Carla: ¡Danny no ha hecho nada! -exclamé.- Fui yo. Bebimos y no tuvimos ningún control. Fue todo muy rápido. -dije negándo levemente la cabeza.- Pero eso no es lo que me preocupa. -bajé la mirada.
Dougie: Puto Danny. Te juro que..
Carla: Que te estoy diciendo que Danny no ha hecho nada. - le corté.- Calla y escucha, ¿vale?
     Dougie asintió resignado y volvió a sentarse en el banco.
Carla: Después de.. eso.. - Dougie se movió incómodo en el banco.- Inés volvió a casa, y.. bueno, se enfadó porque.. -me constaba hablar la vida.- yo le dije que tuviese cuidado con Danny, y claro.. ahora voy yo y.. joder.. -metapé la cara con las manos.
     Nos quedamos en silencio durante un momento. Estaba siendo una situación algo incómoda, pero ahora no pensaba en eso. Recordar como se habían puesto conmigo Danny e Inés la noche anterior me dolía demasiado.
Dougie: ¿Y Danny? -preguntó al fin.
Carla: Me mando practicamente a la mierda.
     Giré mi cara para mirarle, para buscar ayuda.
Dougie: Sé como te sientes.- empezó.- Aunque no te lo creas. -dijo ante mi cara de asombro.- Obviamente no me ha pasado lo mismo que a tí, pero eso de que todos te griten, te echen la culpa de algo, etcétera, pues.. sí.
Carla: Yo.. Dougie, no sé que hacer ahora.. No quiero estar así con ellos. Ni con Danny ni mucho menos con Inés.
      De nuevo se volvió a hacer el silencio. Dougie miraba el suelo, y yo.. Yo intentaba reprimir las lágrimas como podía.
Dougie: Hagámos una cosa. -empezó.- Volvamos a casa, hablas con Inés y yo lo hago con Danny. Os arregláis y todos felices. ¿Te parece?
     Me quedé observándolo. Estaba extraño. No sé, esa idea era buena, pero.. El tono, la forma con la que me lo había dicho era rara, era no propia de Dougie. Asentí pensativa aún y nos levantamos. No volvimos a hablar durante el camino de regreso a casa. Todo esto me estaba superando. ¿Primero Inés y Danny, y ahora Dougie, incluso después de haberle contado todo?



I'm baaaaaaaaaaaaaaaack. :3
Aish, aish, muchas gracias por la espera.
Como dije, sigo con esta historia. Terminé la otra, aunque nadie me comentó el final. e_e'
Esta si que quiero que me comenteis, eh. >.<

LOVE YOU ALL! <3